El Pesimismo Alegre(Mi suicidio)

El Pesimismo Alegre(Mi suicidio)

El pesimismo alegre
NOTA DEL DIRECTOR

Las palabras que están a punto de escuchar fueron escritas hace, literalmente, cien años,
poco antes de que su autor se arrancara la vida con un disparo en el corazón. Y, siempre, en
cada ensayo, en cada lectura o en cada conversación sobre el texto con alguna persona del
equipo, me sucede que no me lo acabo de creer. Porque, por un lado, las palabras de Roodra
resuenan con una absoluta cercanía y contemporaneidad y sientes que podrían ser las
certeras, lúcidas y divertidas confidencias que la noche anterior te hizo un íntimo amigo,
mientras caminabais de madrugada, de taberna en taberna —todo hay que decirlo—, y
porque, por otro lado, que resulta aún más paradójico, para ser “la nota de un suicida”, esas
palabras destilan una desbordante vitalidad y una exquisita pulsión por la vida y por todo lo
que de ella merece la pena: amar, luchar, gozar, enseñar, reír, pensar, compartir…
El pesimismo alegre es un alegato preñado del particular humor y la ironía fatalista de Henri
Roodra. Como alguien evocó con certeza: un poco a la manera de aquel corresponsal de
guerra que filmó su propia muerte. Humanista, librepensador, escritor, pedagogo, profesor
de matemáticas, hedonista y libertario, nos deja en este texto una clase magistral, sobre el
amor, la educación, el capitalismo, el matrimonio, la escuela, el deseo o la amistad…
Y es esta, la amistad, otra de las “ganas” que abisagran este trabajo porque, después de
tantos años cerca, estoy convencido —y tengo probadas razones para ello— de que, ya que
no podemos compartir velada con el mismísimo Henri Roodra, no hay nadie más digno y
coherente en la tierra para rescatar su memoria escénica y defender sus principios que mi
querido amigo, Mario Gas. Gracias a los dos y, siempre, gracias a ustedes que son los
imprescindibles.

Fernando Bernués

Sinopsis

En Mi suicidio, libro de una sinceridad
profunda y decisiva, Henri Roorda
desgrana las preguntas esenciales de la
vida, el amor, la sociedad, el trabajo, el
placer, mientras prepara su fin. Este texto
existencialista avant la lettre, conciso,
tan puro como la belleza que le ataba a la
vida, nació con el título de “El pesimismo
alegre”.
Henri Roorda no era un ser enfermo,
desesperado o embargado por una pasión
imposible. Había sido un dandy, un
degustador de “ los alimentos terrestres”,
un hombre sensual que gozaba con los
placeres mundanos.

Ficha

Autor: Henri Roorda

Dirección y espacio escénico: Fernando Bernués

 

Reparto:

Mario Gas

 

Vestuario: Antoni Belart

Iluminación: Xabier Lozano

Producción: Paola Eguibar

Producción ejecutiva: Ane Antoñanzas

Dramaturgia: Fernando Bernués, Mario Gas y Vicky Peña

Traducción: Miguel Rubio

 

Producción: Tanttaka Teatroa

Próximas representaciones

Mi suicidio (El Pesimismo Alegre)

02/11/2025 19.30 · Teatro Español . Sala Margarita Xirgú Desde el 7-10-2025
Madrid
Financiado por la Unión Europea | Gobierno de España / Ministerio de Cultura / INAEM | Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia